La Transpirenaica de Kilian Jornet (en el 2010)

Guía rápida GR 11

con todo lo que debes saber antes de acometer la Senda Pirenaica

[Reeditamos este artículo de la primera Transpirenaica de Kilian Jornet en 2010, que sin lugar a dudas fue la inspiración para su aventura pirenaica ahora en 2023: 177 cimas de más de 3.000 m en 8 días]

Kilian Jornet no necesita presentación, conocido por sus hazañas en el mundo del skyrunning, el esquí de montaña y las carreras de montaña, y llevarlo al campo del alpinismo, atravesó en 2010 el Pirineo de costa a costa. Jornet convirtió este reto en un viaje personal y emotivo, volviendo a sus raíces en los lugares que lo vieron crecer y desarrollarse como atleta.

Conseguía así enlazar el mar Cantábrico con el Mediterráneo en algo más de ocho días, desde Hondarribia a Llança, 830 km superando un desnivel positivo de 40.000 m, más de 100 Km y 13 h. de carrera al día. Kilian no solo enfrentó un desafío físico, sino que también se embarcó en una jornada de introspección y conexión con la naturaleza.

Un Homenaje a los Orígenes

Iniciando su recorrido en el Mar Cantábrico, Kilian Jornet sumergió sus pies en el agua antes de dirigirse hacia las altas cumbres de los Pirineos. Su ruta lo llevó por senderos que formaron parte de su infancia y juventud, brindándole la oportunidad de reencontrarse con las montañas que lo han definido como persona y como deportista.

Este viaje representó más que una proeza de resistencia; fue un homenaje a los territorios que considera su hogar. Jornet aprovechó la ocasión para destacar la importancia de la conservación de estos entornos, señalando y comentando sobre la flora y fauna locales, demostrando su profundo respeto y conexión con el medio ambiente.

En el siguiente video podéis ver cómo Kilian y sus familiares más cercanos afrontaron esta aventura, rodeados de buenos recuerdos.

Desafíos y Compromiso

La Transpirenaica no estuvo exenta de dificultades. Jornet enfrentó condiciones meteorológicas adversas, el agotamiento físico y los desafíos emocionales que surgen al empujar el cuerpo a sus límites. Sin embargo, gracias a su increíble fuerza de voluntad y al apoyo incondicional de su equipo, pudo superar estos obstáculos, demostrando que los límites están hechos para ser superados.

En el siguiente video podéis ver una visión del estado de ánimo de Kilian mientras asume este desafío humano y atlético tan formidable.

Lo destacado de esta travesía fue, sin duda, la capacidad de Jornet de compartirla con la comunidad. Otros corredores tuvieron la oportunidad de unirse a él en diferentes etapas, gracias a la difusión realizada. Estos momentos de camaradería fortalecieron el sentido de comunidad dentro del trail running, mostrando que, más allá de la competencia, prevalece el compañerismo.A la llegada a Font Romeu unos veinte corredores le acompañaban ya.

Además, figuras como Martin Fourcade y Paula Radcliffe se sumaron para recibir a Kilian en puntos clave como Font Romeu, aportando un sentido de unión en el mundo del deporte extremo.

«Estoy satisfecho por haber compartido esta aventura con tanta gente. Normalmente, el 99% de las veces los deportistas de alto nivel somos egoístas, egocéntricos, va en el ADN de la competición, pero el haber compartido esta travesía con tanta gente te hace ver que uno solo no es nada, que dependemos de tantas cosas. Yo no considero que HAYA conseguido esta travesía, considero que HEMOS conseguido esta travesía. El equipo, Joan, Greg, Patrick, Lotta, Thierry, Olivier, Sonia, David, Migoo, Edu…la familia que también me siguió de cerca, corriendo también muchos kilómetros, los que vinieron a acompañarme que no voy a citar porqué erais muchos los que vinisteis a darme vuestro apoyo… (…) Estoy satisfecho, porqué los tiempos, los récords o las victorias se olvidan pero los momentos que he vivido durante esta travesía nunca se van a borrar de mi memoria.»

Kilian Jornet

En la última final de su travesía por los Pirineos, Kilian tuvo que enfrentarse a malas condiciones climáticas, agotamiento y dolor físico. Pero «gracias a su increíble fuerza de voluntad y a todos los miembros de su equipo, siempre dedicados a apoyarlo y animarlo en su misión, finalmente logró llegar al mar Mediterráneo».

Un Legado de Conciencia

Más allá de los récords, la Transpirenaica de Kilian Jornet quedará en la memoria como un llamado a la reflexión sobre nuestra relación con la naturaleza. Es un recordatorio de que, más allá de buscar la gloria deportiva, podemos encontrar en estos desafíos una forma de conectarnos profundamente con nuestro entorno y con nosotros mismos.

La aventura de Jornet es una inspiración no solo para aquellos interesados en el deporte, sino también para cualquiera comprometido con la preservación del mundo natural y la búsqueda de significado a través de la superación personal. En sus propias palabras, no se trata solo de correr, sino de vivir.