Barranquismo en Madeira
¿Te imaginas viajar a una isla donde existen grandiosas cascadas en mitad de la selva? Rodeadas de roca volcánica y exuberante vegetación, helechos de tamaño colosal y de un color verde que hipnotiza… Esa es la isla de Madeira.
Descubrir Madeira por primera vez, es algo que te cala hondo, en algún rinconcito del corazón, pero descubrir Madeira como barranquista, eso ya es un sueño hecho realidad.
INDICE DE CONTENIDOS
- MADEIRA, uno de los 5 mejores destinos del mundo para hacer barranquismo
- Tres barrancos que no te puedes perder
- Barranco Ribeira Funda
- Barranco Voltas Matilde
- Barranco do Folhado
- Formación, geología y volcanismo
- Historia
- Levadas
Madeira, uno de los 5 mejores destinos para hacer barranquismo del mundo
La isla de Madeira está considerada uno de los 5 mejores destinos del mundo a nivel barranquista y es el mejor destino insular de Europa, según World Travel Awards 2021.
La primera vez que viajé a Madeira, me pareció fascinante la altura y grandeza de sus acantilados, no podía dejar de mirar hacia arriba, pero cuando volví años después, siendo barranquista, descendí algunos de sus barrancos y quedé completamente impresionada por lo salvaje y agreste de sus paisajes.
Grandes cascadas, vegetación exuberante y un aura misterioso
Cuando te adentras en sus barrancos, vives una aventura de verdad, de esas que no se olvidan…La morfología de sus barrancos con grandes cascadas de carácter vertical, rodeadas de exuberante vegetación y grandes helechos de un verde tan intenso que no puedes dejar de mirar… y como no, de la tan característica roca basáltica (volcánica) que los envuelve en ese aura de misterio, dándoles personalidad y fuerza.
Si a eso le sumas los días que sube la niebla y se adentra en los barrancos, sientes que el paisaje te envuelve y el descenso se convierte en una auténtica aventura!
Muchos barrancos son tan largos que se dividen en dos tramos
Ubicados en el norte de la isla, muchos de sus barrancos se componen de tramo superior y tramo inferior, dada la longitud, número de rápeles y desnivel de los barrancos.
Los aperturistas consideraron dividirlos por tramos, dándonos así opción de poder hacer un día el tramo superior y otro día el tramo inferior. Descenderlos de manera integral, estarían catalogados como descensos complejos sólo para barranquistas expertos y en buen estado de forma física, dada la gran longitud de éstos.
Los accesos a los tramos inferiores, los realizaremos a través de sus famosas levadas (canalizaciones de agua que transportan el agua de los barrancos a diferentes lugares / pueblos de la isla), al igual que cuando queramos abandonar los tramos superiores.
Tres barrancos que no te puedes perder: Ribeira Funda, Voltas Matilde y Folhado
BARRANCO RIBEIRA FUNDA
Dificultad: media-alta; Longitud: 600m; Desnivel: 195m; nºrápeles: 9; Rápel max.: 60m;
Éste barranco situado a escasos metros del océano Atlántico, es un precioso y juguetón descenso que no te dejará indiferente incluso hasta llegar al final, donde nos espera la grata sorpresa de unas vistas fascinantes al océano desde el último rápel.
Cuando entras en Ribeira Funda, sientes su explosión de colores que juegan con el negro de la roca basalto y el verde de su vegetación.
En él nos espera una gran cascada de 55 metros muy abierta, que descenderemos bajo la acusada caída del agua, permitiéndonos en los meses de estiaje un caudal apto para el descenso, también podremos disfrutar de algún salto, dependiendo de su caudal.
El descenso se compone de 9 rápeles y algunos destrepes y se trata de un descenso técnico que requiere preparación y buen manejo de cuerdas.
Con una aproximación caminando de apenas 20 minutos, se trata de un descenso muy completo y obligatorio realizar en tu paso por la isla!!
BARRANCO VOLTAS MATILDE
Dificultad: iniciación-medio; Longitud: 900m; Desnivel: 300m; nºrápeles: 12; Rápel max.: 28m;
Se trata de un barranco de nivel iniciación/medio, ideal para la práctica del rápel y para empezar tu semana de barrancos en la isla..!
Ubicado en Chao da Ribeira, para llegar hasta él, ascenderemos por un bonito sendero que al poco se convierte en escaleras que en poca distancia ganan desnivel, y poco a poco, nos introducen en la magnífica selva de laurisilva de Madeira, ofreciéndonos así un bonito paisaje de postal en su aproximación.
Con una extensión de 900 metros y un desnivel de 300 metros, se trata de un descenso con 12 cascadas, una de ellas de hasta 28 metros de altura.
Rodeado de un entorno mágico a base de helechos y laurisilva, no desmerece su visita.
BARRANCO DO FOLHADO
Dificultad: media; Longitud: 700m; Desnivel: 300m; nºrápeles: 14; Rápel max.: 27m;
Nos encontramos con un barranco de más larga duración que los anteriores, tratándose de un descenso algo más fácil en el inicio y que poco a poco se va convirtiendo en un barranco más técnico con cascadas que no te dejarán indiferente.
Ubicado también en Chao da Ribeira, Folhado es un descenso de 14 rápeles, teniendo su rápel más largo 27 metros.
Con una exigente aproximación andando de más de 1hora, el acceso lo haremos por las famosas y temidas escaleras del camino Lombo Barbinhas. Nada más y nada menos que aproximadamente 1.000 escaleras ¡!!
En este barranco la exuberante vegetación siempre está presente. La belleza de sus cascadas y su entorno te introduce en una sensación de estar en la mismísima selva. Disfrutaremos también de sus rápeles acuáticos.
Antes de llegar a su final, en los últimos tres rápeles, Folhado comparte estas tres últimas cascadas con los barrancos vecinos, que son Seixal Inferior y Hortela Inferior.
Esto quiere decir, que los últimos tres rápeles, pertenecen a los 3 barrancos por igual, y siempre que hagamos uno u otro barranco, compartiremos los últimos tres rápeles, finalizando todos en el mismo sitio, deshaciendo en el retorno hacia el coche, parte de su aproximación.
FORMACIÓN , GEOLOGÍA Y VOLCANISMO
Madeira es vecina de las islas Azores, de las islas Canarias y de las islas de Cabo Verde, formando parte de las Islas de la Macaronesia.
El archipiélago de Madeira está formado por la Isla de Madeira, Porto Santo y las Islas Desiertas.
Están situados a una distancia aproximada de 1.000 kilómetros de la costa de Portugal.
Funchal, la principal ciudad y puerto en la costa sur de la isla, dista 660 kilómetros de la costa africana.
Madeira, de clima subtropical y con montañas volcánicas cortadas por profundos valles hasta el mar, tiene una forma alargada de este a oeste: su longitud es de aproximadamente 55 km, y su anchura de 24 km, con 160 km de litoral. La altitud media es de 1300 metros, donde destacan el Pico Ruivo (1.862 metros), el Pico das Torres (1.850 metros) y el Pico do Arieiro (1.818 metros). Las costas son empinadas y las playas de arena son raras. En la costa sur, al oeste de Funchal, se eleva Cabo Girao, uno de los acantilados más altos del mundo.
El archipiélago fue formado debido a la actividad volcánica. El carácter escarpado de la costa de Madeira continúa de la misma manera bajo el nivel del mar.
HISTORIA
El bosque de laurisilva que cubría la isla antes de su colonización y le dio su nombre (madeira significa «madera» en portugués), fue casi completamente quemado por los primeros colonos, y solo unas pocas áreas en los valles del norte de la isla se han conservado. Fue incluído en el Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1999. Pero el bosque se ha recuperado y extendido con especies europeas y tropicales introducidas por los colonos que hoy conviven con las especies endémicas. La humedad del norte favorece el crecimiento de una vegetación exuberante, incluyendo laderas casi verticales, y hasta 70 especies de helechos.
LEVADAS
En el siglo XVI, los portugueses comenzaron a construir las levadas para regar las plantaciones de caña de azúcar, ya que, en aquella época, el azúcar era conocido como «oro blanco», y muy pronto las viñas que producirían el vino de Madeira. En aquella época, la construcción, hecha con maderas y piedra volcánica, era de carácter privado para el regadío, unas pocas se usaban para llevar el agua de un lado a otro de la isla, del norte al sur.
En el siglo XIX, el estado empieza a subvencionar la construcción de las levadas y hace su aparición el cemento. De este periodo destaca la levada Velha do Rabaçal, construida entre 1835 y 1860, y que hoy es punto de partida para una de las excursiones más realizadas de la isla, la que visita las levadas de Risco y de las 25 Fontes.
En la actualidad, las levadas se han convertido en uno de las atractivos de la isla, permitiendo a millones de curiosos realizar senderismo recorriendo a pie, los miles de kilómetros que componen esta gran obra de arte realizada por el hombre.
Con las nuevas construcciones, la red cuenta con más de 2.000 km y 35km de túneles.
Sin duda, de una gran belleza, no te puedes perder algunas de las más bonitas , como son:
–Levada de las 25 Fontes, la más visitada de la isla.
–Caldeirao Verde, se puede ver una cascada de 80 metros.
–Serra do Faial, en su inicio hay un criadero de truchas y numerosas orquídeas.
–Furado, es una de las más antiguas de la isla.
Y muchas más..
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