El secreto de los árboles
Por Ernesto Tejedor, Miguel Ángel Esteban, Nabil Halaihel Kassab
“Los bosques, esos espectadores silenciosos de nuestras vidas, que nos acompañan a lo largo de las generaciones. El sol, la lluvia y el viento moldean nuestros montes (…). Año tras año las estaciones se suceden y allí permanecen los arboles, mudos testigos del paso del tiempo. Sus troncos esconden un secreto excepcional para quienes saben buscarlo (…).”
Que el clima está cambiando es indudable.
Realmente los medios de comunicación se hacen eco de cualquier aspecto que sea desastroso.
Pero no hace el frío que hacía antes.
La naturaleza es muy tozuda, tiene sus leyes, nosotros podemos vencerla hasta determinado umbral.
Las sensaciones que uno percibe sobre le clima son subjetivas.
Que durante un tiempo se ha dicho que la Antártida se estaba deshelando, hoy se sabe que el hielo de la Antártida está aumentando.
Las actividades del hombre están modificando la composición química de la atmósfera.
Llueve la mitad que llovía.
Que a la naturaleza la podremos vencer el día que sigamos sus leyes.
Catástrofes ha habido siempre por causas climáticas, en cualquiera de las fluctuaciones.
El incremento de gases de efecto invernadero modifican el clima, está fuera de discusión.
Todos los modelos, lo que nos dan son hipótesis.
Lo más probable, y lo más lógico, ciclicamente, es una tendencia a ir a un periodo más frío.
La perspectiva humana desde luego es corta.
Frío, desde luego hacía más frío que ahora.
El saber cómo va a evolucionar el clima en el futuro no tiene posibilidades, pueden intervenir y van a intervenir otros factores con los que no se cuenta en determinados momentos.
“El hombre es capaz de desviar ríos, arrebatar tierras al mar, transformar los paisajes. ¿Pero puede transformar el clima con su intensa actividad de explotación de los recursos naturales? ¿El cambio climático es obra del hombre?
La respuesta a esta pregunta exige comparar nuestros climas con los del pasado. Los árboles pueden ayudarnos en esta labor.
