Camino de Santiago en bici para principiantes

El Camino de Santiago en bicicleta es una experiencia enriquecedora que te enseña cuáles son tus propios límites y nos da otra perspectiva de la vida. El Camino de Santiago tan sólo lo puede explicar y entender el que lo ha recorrido, disfrutado y sufrido.

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Lo que nunca te dijeron del camino de Santiago: 9 consejos para hacer el Camino de Santiago en bici.

Habíamos oído muchas cosas e imaginado otras tantas que iban a pasarnos cuando preparamos el camino de Santiago. Como habrás comprobado hay mucha información en internet sobre el camino de Santiago, con un montón de buenos consejos y apoyo bien intencionado, indicaciones donde comer, donde dormir y demás, pero también hay otras cosas que aunque al final del viaje solo quedan en anécdotas, creemos que no estaría mal nombrarlas y no te pillen por sorpresa.

1. Los últimos 100 Km son los importantes:

Podrás hacer todos los kilómetros que quieras, podrás venir desde Noruega, podrás tardar 3 meses en hacerlo, pero si no haces los últimos 100 km hasta Santiago no tendrás derecho a la famosa compostelana que acredita que hiciste el camino, en el fondo el camino es algo más espiritual y personal y nadie más que uno mismo sabe el esfuerzo y el coraje que necesitaste para hacerlo, pero créenos, no es agradable que después de hacer un recorrido largo y llegar a la oficina hecho unos zorros y con mas fugas que el prestige, haya alguien que te diga que no tienes derecho a la compostelana, no es agradable cuanto menos.

2. ¿Colas para la catedral?

Pues si, tendrás que hacer cola para acceder a la catedral, no es que haya bandas de peregrinos esperando para entrar, pero si llegas en festivo tendrás que ponerte a la única cola para entrar, allí encuentras excursionistas, autobuses enteros de jubilados, turistas y demás. No estamos en contra de esto, pero si creemos que el peregrino y más aún el que viene andando con muchos kilómetros en sus piernas, a muchos de ellos les cuesta ya mantenerse en pie, tengan que esperar en la misma cola,deberían estos últimos tener preferencia sobre los demás o al menos una entrada alternativa, a veces parecen que olvidan que el peregrino es el centro de todo este “circo”.

3. Cuidado en las indicaciones enalgunos pueblos.

No hay que olvidar que el camino de Santiago aparte de ser un viaje espiritual, en muchos casos, se está convirtiendo en un negocio del que viven muchísimos pueblos, esparte del encanto del camino, pero es cierto que en determinadas ocasiones y en determinados pueblos encontrarás indicaciones en direcciones opuestas, tranquilo no te has perdido ni tampoco el esfuerzo hace que veas doble, una de ellas te hará dar un rodeo para que pases por la puerta del bar de turno y te tomes un par de cañitas para reponer fuerzas para que un par de calles mas allá vuelvas al camino original.

4. Cuidado con el menú del peregrino

Entendemos que hay pueblos que viven del camino, sin el no existirían, pero cada vez más se está volviendo en un negocio en busca del euro del peregrino, hoy en día el perfil del peregrino ha pasado de ser un “tirado” para ser de clase media que se gasta entre 20 y 30 euros diarios, teniendo en cuenta que el volumen de peregrinos que realizan el camino al año es muy alto, esto traducido en euros es muchísimo dinero, vamos , un gran negocio, pero realmente en muchos pueblos que solo hay un bar o una tienda, los precios son realmente altos, como los famosos menús del peregrino repleto de buenos alimentos y buenos precios, en su mayoría lo son, pero hay lugares en el que no deja de ser el mismo menú para todos pero con un suplemento de 1 o 2 euros por “llamarse”el menú del peregrino, esto es peligroso, porque en el mismo albergue, entre peregrinos siempre nos avisamos del sitio que es barato, aquel que te trata bien y de aquel no lo hace.

5. El turista-Peregrino (El peregrino de Vida Alegre).

De vez en cuando te encontrarás un espécimen que abunda en los albergues que para tu desgracia son de una sola Sala; sueles conocerlos en el bar del pueblo cenándose su buen menú cargado de grasas y viandas difíciles de digerir, todo regado con vinos y licores de la tierra. Y lo acabarás de conocer cuando al llegar al albergue “el bicho” claro está con semejante carga está dando la más grande en forma de Ronquidos y derivados;tú como a las 2 horas te das cuenta que no puedes pegar ojo, pues inicias la peregrinación con tu colchón a la cocina, pasillo o estancia que encuentres más vacía, por que claro esta finalmente “El bicho” se encuentra sólo en la habitación o con su compañero de desventuras (que claro está como ya habrá aprendido que el enemigo está en casa, se habrá puesto igual que él)

6. El camino no es una carrera (aunque a veces lo parece).

Veras que para algunas personas es obsesivo el tema de llegar primero al albergue y de esta forma cogerlos mejores sitios y no quedarse nunca sin sitio en el Albergue, pero esa es parte de la gracia de esta Aventura, pararse a disfrutar de cada etapa, y si no hay sitio en un Albergue, siempre encontraremos otro, y si no que más bonito que dormir viendo las estrellas.

NO corras disfruta del camino, y acorremos suficiente en el día a día.

7. Los lugareños son la mejor guía del camino.

Si tienes dudas pregunta a la gente delos pueblos y aldeas por donde pasas, ellos están muy orgullosos de ser parte del camino y son los que mejor te pueden indicar, recuerda es su comarca,y la conocen igual que tu conoces donde vives.

8. “Un clásico” El tiro al aire.

Tienes tu mapa, tus indicaciones y aparece una bifurcación de flechas, y siempre hay alguien que dice!es por Aquí estoy seguro¡ y 3 o 4 kilómetros más tarde os dais cuenta que era por el otro lado y media vuelta, eso es un tiro al aire, se producen muchos en el camino y por eso las etapas son siempre varios kilómetros más largas de lo que pone el libro de ruta; pero al finalizar es una parte divertida del camino, ¿Cuantos tiros al aire has pegado?

9. Nunca cumples la planificación inicial.

Siempre llevamos un plan de ruta, hoy hago tantos kilómetros, llego hasta aquí; pero no te agobies todo cambia y tendrás que hacer varias modificaciones de itinerario, pero al final llegarás a Santiago, tal y como habías planeado. No te obsesiones con la planificación previa, deja que el camino te planifique tu ruta.

Esto es solo un ejemplo de las cosas que nunca nos dijeron del camino y fuimos descubriendo por nosotros mismos, algunas nos gustaron, otras no tanto, pero una cosa tenemos claro, Y al final TODO, créelo, TODO valdrá la pena.