Benasque, Llanos del Hospital / Foto: Basotxerri-[CC-BY-SA] Wikimedia Commons
Benasque, Llanos del Hospital / Foto: Basotxerri-[CC-BY-SA] Wikimedia Commons

Llanos del Hospital, en pleno corazón del Parque Natural Posets Maladeta

En la temporada invernal la práctica de diferentes tipos de esquí y en el verano senderismo de distintos niveles, son algunas de las opciones que ofrecen los Llanos del Hospital. Están ubicados a unos 13 kilómetros de la localidad de Benasque, en el Pirineo de Huesca, en pleno corazón del Parque Natural Posets Maladeta, en la Ribagorza.

Hace ocho siglo que los monjes hospitalarios construyeron un sitio para acoger a los comerciantes y peregrinos que cruzaban los Pirineos. En ese mismo emplazamiento, en la actualidad se encuentra un hotel, rodeado de los bellísimos parajes que circundan los Llanos del Hospital.

Las características de los Llanos del Hospital hacen que sea un destino que se puede disfrutar durante todo el año.

Temporada de invierno

Esquí de fondo, esquí nórdico y esquí de travesía son algunas de las opciones para disfrutar las imponentes nieves de los Pirineos. La pista de esquí de fondo de los Llanos de Hospitales cuenta con tres circuitos balizados que parten de una altura mínima de 1.750 metros, llegando hasta los 1.940 metros.

La altura a la que se encuentran las pistas, así como la orientación del macizo de Aneto-Maladeta, aseguran que habrá nieve en gran cantidad y de la calidad adecuada para la práctica del esquí.

Son un total de treinta kilómetros de pistas mantenidas en excelente estado, que discurren en parajes de extraordinaria belleza. Sumado a ello, los visitantes cuentan con variados servicios a su disposición en la estación para su completo disfrute.

Y en verano

La naturaleza con el pleno esplendor que le otorgan los meses de verano, convierten a los Llanos del Hospital en un paraje adecuado para el disfrute de los senderistas.

Quienes por sus preferencias opten por rutas de alta montaña, en los alrededores se despliegan 60 impactantes picos, con una altura de hasta 3 mil metros.

Para rutas más sencillas, hay variadas excursiones que pueden realizarse por la zona, aptas para toda la familia.

Algunos de los senderos a escoger son los que llevan al Forau d’Aigualluts, al refugio de la Renclusa, el sendero geomorfológico o el sendero al Portillón de Benasque.

El parque natural está compuesto no sólo por los picos, sino también por glaciares, ibones, collados, ríos, barrancos y cascadas. Al recorrerlos se podrá disfrutar de vistas privilegiadas de los Pirineos y Francia.

Otra opción apta para toda la familia es pasar un día en la población de Benasque y disfrutar de los encantos de sus parajes, artesanías y la gastronomía típica de la región.

Restos del pasado

Hace poco más de una década, se localizaron junto al edificio del Hospital de Benasque antiquísimos círculos de piedras de granito. Las excavaciones posteriores revelaron que se trata de un monumento funerario en cuyo centro se encontraban las cenizas de una persona.

Por sus características, los investigadores concluyeron que se trata de un círculo megalítico que data de la Edad de Bronce, lo que demuestra que estos parajes eran recorridos por los nómadas desde hace centurias.

Foto portada: Basotxerri-[CC-BY-SA] Wikimedia Commons

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