Ropa de lana merino para montaña: todo lo que tienes que saber y cómo cuidarla
Cuando uno se compra ropa de montaña busca que ésta aporte el calor necesario, que seque la humedad los más rápido posible y que funcione de aislante. Para cumplir estos requisitos las marcas optan por emplear lana merino o fibras sintéticas en la fabricación de las prendas de ropa. Todas las marcas que fabrican ropa especializada para montaña emplean estos materiales para la fabricación de las prendas. Ambas son de una muy buena calidad, pero la lana merino destaca en algunos aspectos. En este artículo nos centraremos en la lana merino. Profundizaremos acerca de sus principales características, y daremos los consejos básicos para su cuidado.
La lana merino está elaborada con la lana de las ovejas de la raza merina. Éstas se encuentran principalmente en Australia, Nueva Zelanda y Sudáfrica. Se pueden encontrar en el mercado prendas de todo tipo fabricadas con este tipo de tejido; desde camisetas hasta ropa interior.
La marca noruega Devold (Haz click para ver artículos) lleva ya trabajando más de un siglo y medio con lana de alta calidad, y ha vestido con su ropa outdoor algunas de las hazañas e hitos más renombrados en su larga trayectoria.
Características de la lana merino.
Todas esas prendas comparten las siguientes características:
- Absorbe la humedad: este tipo de lana es capaz de absorber el vapor del agua. La humedad queda retenida en las fibras de la lana. Sin embargo, la retención del agua no implica que la lana se moje. La superficie de la fibra repele el agua, por lo que el material da la sensación de que está seco.
- Es un aislante térmico y transpirable: dentro de las fibras hay muchas bolsas de aire que hacen que lana sea aislante. Las bolsas de aire también permiten que el aislamiento funcione también en condiciones húmedas. Las cámaras de aire también contribuyen en la transpirabilidad de las prendas.
- Suavidad: las fibras de la lana merino son muy finas y en consecuencia cómodas. Sin embargo, existe el prejuicio sobre la lana de que «pica» en la piel. Eso no se cumple en las prendas de lana merino, ya que son muy suaves.
- No huele: la lana merino es antibacteriana. Esto significa que las bacterias difícilmente se alojan en la fibra de la lana, y por lo tanto no huelen mal incluso después de usarla durante una larga actividad.
Preguntas frecuentes.
Las características generales de la lana merino antes mencionadas aportan cualidades únicas a las prendas fabricadas con este tejido. ¿Sabes cuáles son? A continuación, daremos respuesta a las preguntas más habituales acerca de la lana merino.
¿Por qué no pica la lana merino?
Las fibras de la lana merino son rizadas y componen una estructura ondulada. Además, esas fibras contienen millones de bolsas de aire capaces de mantener el cuerpo caliente. Gracias a la unión entre las fibras, hay menos puntos de contacto entre el material y la piel y por eso la lana merina no provoca picores. Además, es muy suave al tacto.
¿Cómo regula la temperatura?
La lana merino es capaz de regular la absorción de humedad, por lo que también regula la temperatura corporal. Los tejidos sintéticos suelen dejar pasar a la humedad y no la absorbe. En caso de la lana merino, es diferente ya que es hidroscópico; es decir, absorbe el vapor del agua para aislarlo de la piel del cuerpo. La lana merino es capaz de contener el 30% de su peso en humedad. Además, contiene la humedad, pero al tacto parece que esté seca. Estas propiedades son exclusivas en la lana merino, y hacen que sean prendas ideales para vestirlas durante los días cálidos.
¿Por qué calienta aunque esté mojada?
Esta es una de las cualidades más sorprendentes de la fibra merina. La humedad que contiene, la utiliza para generar calor. Esto se debe a un proceso físico que se produce entre las moléculas de las fibras y del agua. Las moléculas chocan entre ellas y generan energía. En consecuencia, el aumento de temperatura puede llegar a ser de más de diez grados. La capacidad de calentamiento variará según la calidad de la lana. Sin embargo, las prendas elaboradas con tejidos sintéticos pierden el calor en cuanto se mojan. Para que el funcionamiento calefactor de las prendas de lana merino sea lo mejor posible, uno se debe asegurar que la prenda esté seca antes de vestirla.
¿Por qué no huele después de vestirla?
A diferencia de las fibras sintéticas, las fibras merinas tienen una superficie escamosa, donde difícilmente se sedimentas y crecen las bacterias. En principio, el sudor no huele mal, pero las baterías hacen que se produzcan olores desagradables. En el caso de las lanas merino es más complicado que se creen esos olores, ya que el tejido es muy eficiente en absorber y evaporar el sudor. Como consecuencia, se pueden vestir las prendas de lana merino durante muchas horas o muchos días, sin causar desagrado por culpa de los malos olores.
¿Tiene desventajas la lana merino?
Es cierto que la lana merino es muy respetuosa con el medios ambiente porque es 100% natural y biodregradable, y porque al no tener que limpiar las prendas continuamente hace que el impacto en la naturaleza sea menor. Sin embargo, existen algunas malas prácticas que se realizan en algunas granjas y criaderos de ovejas merina de Nueva Zelanda, Australia y Sudáfrica. Sobre todo se critican a los criaderos de Australia porque los animales sufren un doloroso tratamiento para prevenir la infección de parásitos. Por suerte, se ha creado un movimiento en contra de esta práctica y hoy en día los fabricantes pueden identificar el proceso de extracción que tiene la lana que compran. Por lo tanto, se recomienda comprar ropas de lana merina de las mejores marcas, porque seguramente estarán comprometidas e ofrece una lana de primera calidad, y lana étnicamente correcta. Eso sí, esto influye que el precio será un poco más elevado de los habitual.
¿Lana merino o fibras sintéticas?
A modo de conclusión, se puede afirmar que la lana merino aporta grandes beneficios en comparación de las fibras sintéticas. Dos de sus puntos fuertes son la suavidad, y la capacidad de regulación de la temperatura. La última es que no huelen mal. Así, en caso de que vayas a hacer excursiones de varios días necesitarás menos recambios de ropa, y tendrás que cargar con menos peso en tu espalda.
Cuidado y limpieza de la lana merino.
Aunque hayamos mencionado que las prendas de lana merino no genera malos olores, es lógico que se deban lavar tras su uso. Eso sí, como en la mayorías de las prendas de ropa hay que limpiarlas lo menos posible, para que los tejidos no se vean dañados. A continuación, os explicaremos cada cuánto y cómo limpiar las prendas de lana merino. La lana merino se puede decir que es autolimpiante. Esto se debe a la naturaleza viva de la lana. Gracias a esta propiedad, uno se puede poner una prenda de lana merino durante bastantes días seguidos. Para su limpieza básica, es suficiente con colgarla al aire libre. Lo ideal es dejarlas ventilando en climas húmedos, para que el vapor del agua expulse la suciedad y los malos olores. Así, las fibras vuelven a su estado natural, y recuperan la elasticidad tan característica. Se recomienda dejar un día de margen entre uso y uso de una prenda de lana merina. No obstante, también se pueden limpiar estas prendas a máquina siempre y cuando se sigan estrictamente las indicaciones de los fabricantes.
El uso de la lavadora.
En caso de decidir usar la lavadora hay que seguir varios consejos para no estropear las sensibles fibras merinas. Lo primero de todo es que no se deben usar detergentes que contengan plastificantes. La lana merino es más fina que la convencional, y estos plastificantes pueden dividir y dañar las moléculas de las fibras merinas. Además, si se usan los detergentes erróneos, las prendas pueden perder su forma natural. Los detergentes recomendados son aquellos detergentes de pH neutro y sin suavizantes. También se pueden utilizar los detergentes que no tengan aditivos artificiales.
Para decidir el programa de lavado que vayas a utilizar deberás leer las instrucciones de cada fabricante. Los programas varían según las prendas. Lo más habitual será utilizar programas cortos a 30 o 40 grados. Para el secado de la lana merino no se recomienda para nada el uso de una secadora. Lo más recomendable es dejar la prenda en una superficie plana y dejarla que se seque. Ponerla al aire libre también funciona.